Gabriela Neme, cada vez más sola, apuesta a la aventura nacional y negocia candidaturas familiares

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Ambiciones, aislamientos y apuestas familiares: cómo se reconfigura el tablero electoral de cara al 2025.

En medio de un escenario político convulsionado, con realineamientos acelerados y tensiones internas en aumento, la dirigente Gabriela Neme parece apostar todas sus fichas a una candidatura nacional en soledad. La actual diputada capitalina, que supo tejer alianzas con diversos sectores de la oposición formoseña, hoy enfrenta un proceso de aislamiento creciente entre sus posibles socios que también tienen ambiciones propias y analiza lanzarse en busca de una banca como diputada nacional y, en paralelo, intenta asegurarse un lugar para su hijo en la lista de concejales para la ciudad de Formosa, en un movimiento que combina ambición política y lógica familiar.

Este giro individualista se da en un contexto donde La Libertad Avanza formaliza hoy su reconocimiento como partido provincial, y sus principales referentes han decidido cerrar la puerta a acuerdos forzados. “No necesitamos alianzas oportunistas para competir”, expresó ayer el presidente del espacio en Formosa, López Tozzi, marcando un límite claro a sectores de la oposición tradicional. La estructura libertaria, que ya compitió con lista propia en 2023, busca consolidar así su autonomía para el 2025.

En línea con esa postura, tanto Fernando Carbajal como Francisco Paoltroni mantienen firme su rechazo a compartir escenario con quienes consideran parte de “la casta opositora” formoseña. La estrategia del sector apunta a renovar la representación sin reciclajes ni acuerdos con figuras que ya transitaron diferentes alianzas electorales.

Con el retorno del intendente de Laguna Yema, Nilton Werning, al esquema del Modelo Formoseño, se despejan algunas dudas sobre la lealtad interna y la noticia sacudió en las Lomitas, donde el intendente Atilio Basualdo parece caminar por la cuerda floja. Sin una estructura sólida que lo respalde, aferrado a su círculo íntimo y debilitado tras recientes controversias, Basualdo también negocia la inclusión de su hijo, Pablo Basualdo, en la lista de candidatos a diputados provinciales -al igual que Neme- como condición para poner su nombre y recursos para sostener una campaña electoral en tiempos difíciles.

Mientras los liderazgos se reconfiguran y las estructuras políticas buscan consolidarse, crece el protagonismo de las estrategias personales y familiares, en una carrera electoral que ya comenzó a mostrar sus primeras tensiones. ¿Hasta dónde podrá llegar cada dirigente en su apuesta individual? ¿Será el 2025 un año de renovación real o solo un reacomodamiento de apellidos conocidos?