Caraballo: “No hay justicia, hay persecución política”

El ex convencional constituyente y concejal de la ciudad capital se pronunció al respecto.
En entrevista con Radio Formosa, el ex convencional constituyente y concejal, Williams Dardo Caraballo, se pronunció sobre la situación judicial de Cristina Fernández de Kirchner, denunciando una clara maniobra de proscripción política por parte del Poder Judicial. En sus palabras, lo ocurrido no responde a razones jurídicas, sino a una estrategia para impedir que una figura central del movimiento nacional y popular participe de la vida democrática del país.
“Este fallo de una Corte absolutamente deslegitimada no tiene sustento jurídico ni razonabilidad técnica: se trata de una decisión netamente política”, afirmó. Para Caraballo, el trasfondo de la resolución es claro: “Cristina fue proscripta por temor a que vuelva a ganar en las urnas. Esto no es nuevo: es parte de una larga historia de persecución al movimiento nacional y popular”.
El dirigente recordó que el peronismo ya ha sufrido proscripciones en el pasado. “A Perón le impidieron participar durante 18 años. Lo proscribieron hasta cuando quiso ser vicegobernador en 1962. Hoy, a Cristina la condenan sin pruebas, en un juicio donde se le negó el derecho a incorporar la defensa completa, y sin pericias que justifiquen la sentencia”, sostuvo.
Apuntó también al accionar del Poder Judicial: “Este fallo va a profundizar el desprestigio de la Justicia. Esta Corte actúa como un triunvirato sin legitimidad de origen, con jueces puestos por mecanismos inconstitucionales. No responden a la Constitución Nacional, responden al poder económico”.
Caraballo criticó con dureza la figura de asociación ilícita aplicada a una expresidenta. “Eso solo puede aplicarse a un Estado criminal como el de la dictadura. Usar esa figura contra una representante democrática como Cristina es un absurdo jurídico. Se condena sin pruebas y por conveniencia política”.
Finalmente, llamó a la militancia a no desmoralizarse. “Esta historia nos tiene que dar la fuerza para resistir. La crueldad con la que se celebra esta injusticia es un síntoma de que queda mucho por madurar como sociedad. Pero también es un llamado a profundizar la democracia. Cristina representa la voluntad popular. Silenciarla es silenciar al pueblo”.